Estilográfica Paper Mate MKV

Al interesarme por las estilográficas, mi padre me comentó que por el trastero debía estar guardada su vieja pluma, regalo de mi madre. Subimos al trastero, pero no la encontramos y fin de la historia.

Un año después, cuando ya disponía de mis propias plumas, haciendo limpieza por el trastero, encontramos la pluma, ¡qué ilusión me hizo! Mi padre me dijo que podía quedármela, además seguramente ya no serviría. él está feliz con su Lamy Safari.

Ahí comenzó una odisea que ha durado más de un año. Como mi padre advirtió, estaba atascada, pero no rota. Las plumas no se pueden quedar inutilizadas con tinta en su interior, y esto fue lo que pasó. Esta pluma pasó más de 20 años en las penumbras. Con paciencia, le di infinitos baños con agua jabonosa, con un poco de amoniaco, con más agua y más agua de nuevo. La guardé, no daba resultados. ¡Pero quería solucionar el problema! Como algunos compañeros de un foro de estilográficas me dijeron, las piezas del alimentador y plumín están pegadas, costumbre de antes, no como ahora que hay algunas plumas muy fáciles de desmontar. Lo que tenía que hacer era agua y más agua, algún día se reblandecería y el problema se solucionaría.

Y ese día llegó. Estaba muy satisfecha de haber hecho renacer a la pluma. Lo mejor, es que escribe divinamente bien. Esta tiene un punto M y es un poco flexible. En el transcurso de los lavados, rompí el convertidor, que tampoco estaba en sus mejores momentos.
Mientras se sucedían baños, busqué información sobre la pluma, y es el modelo MKV, fabricado en los 80 en la Alemania oeste.

Las estilográficas también tienen historias de superación...