Esta novela de Jane Austen, fue la última que escribió la autora antes de su muerte. Una obra más madura y breve que las anteriores.
La protagonista, una mujer que ha pasado su edad de casamiento, se rencuentra con su viejo amor, un hombre al que rechazó por persuasión de una amiga, pues no era hombre de medios. Pero ahora las cosas han cambiado.
Aunque me gusta su estilo irónico, el haber leído varios de sus libros con poca diferencia temporal, ha causado que este libro, el último de Jane Austen que he leído, me haya resultado aburrido, era como leer lo mismo. Sí, la historia en sí es distinta, pero todas son similares. Lo bueno de esta novela, es que la mujer, al ser de más edad, tiene una perspectiva más madura, así como la escritora cuando escribió la novela. La volveré a leer en un tiempo prudencial, merecerá la pena.
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