Té negro: English Breakfast.

Un clásico del té negro es el English Breakfast, mezcla de Assam y Ceilán. 

Es un té de sabor muy fuerte y con bastante cafeina, como su nombre indica ideal para el desayuno; suele tomarse con leche, azúcar, limón.

Personalmente me resulta un té demasiado amargo. Si lo tomo solo tengo que acompañarlo con algo de comer, dulce mejor. Si no, me gusta con limón o miel. Probé añadir leche, pero no me convencía el sabor; a parte prefiero no añadir leche, pues el té pierde de esta forma algunos de sus beneficios.
Aunque no me gusta, entiendo, que en general lo hace menos amargo.
He probado a dejarlo menos tiempo infusionando, y tras probar con distintos tiempos, no he conseguido el sabor perfecto.

Y como prefiero tomar el té solo para disfrutar de sus matices y así el English Breakfast me resulta muy seco y amargo, no lo he vuelto a comprar.